Las chimeneas representa múltiples ventajas en el hogar, no sólo en las estaciones más frías, sino como un buen elemento decorativo. Con los años, su desarrollo ha permitido crear nuevos modelos en cuanto a diseño, llegando a constituir una parte importante de nuestra estancia.

Desde el Renacimiento, época en la que data su origen, ya comenzaron a ser muy importantes, pero con el inconveniente que sólo podían ser adquiridas por la clase alta, estando muy presente entre las familias reales. Actualmente, están al alcance para casi la mayoría de las personas que puedan permitírselo en sus hogares.

Sus diferentes modelos y estilos, como los rústicos, tradicionales, modernos o vanguardistas constituyen una buena alternativa para la decoración de nuestras casas, al ofrecer elegancia y estilo. Además, aportan tranquilidad y sensación de acogida allá donde se instalen.

El fuego, elemento muy presente en nuestras vidas desde la antigüedad, al protegernos del frío, también constituye un elemento visual que acoge, generando compañía, permitiendo convertir tardes y noches en cálidas estancias.

Otro de sus beneficios es que representa una fuente de ahorro importante, si tenemos en cuenta que el máximo gasto que representa es la compra de la leña. A su vez, los actuales modelos vienen acompañados de una estructura que facilitan el sistema de limpieza, por lo que no nos supondrá un gran esfuerzo su mantenimiento.

En cuanto a su forma, éstas pueden ser abiertas, pero actualmente suelen ir acompañadas de un cristal a modo de puerta lo que permitirá fomentar la seguridad en aquellos hogares con presencia de niños o personas más vulnerables.

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